SoliDemoWatch – Práctica abolicionista contra la razón de estado (es)

SoliDemoWatch (que viene de las palabras alemanas para observación solidaria de manifestaciones) se fundó en octubre de 2023 para actuar contra la represión policíaca en el contexto de las manifestaciones solidarias con Palestina. Hasta ese momento, en Colonia y Bonn no había estrategias y estructuras para proceder en casos de violencia policíaca contra la vida palestina. Inspirados por otras prácticas que ya existían, como la de grupos como, por ejemplo, el Grundrechtekomitee y Copwatch*, desarrollamos un acercamiento propio con el fin de crear una estructura vinculante y solidaria. Una estructura que apoya las manifestaciones por el cese al fuego y un Palestina libre.

Por ello, la práctica de la observación solidaria de manifestaciones es relativamente nueva y
Por ello, la práctica de la observación solidaria de manifestaciones es relativamente nueva y está en constante evolución. No obstante, nos gustaría compartir nuestras experiencias y hacer accesibles los conocimientos que hemos adquirido. Sobre todo porque nos damos cuenta de que la policía se siente limitada en su actuar por nuestra práctica. También estamos viendo que muchos de los que participan en la manifestación, incluides nosotres, se sienten empoderades para estar en la calle. Esta toma de conciencia puede ayudar a los grupos locales en sus actividades políticas y también podría inspirar a activistas de otros lugares. Estamos convencides de que este conocimiento del movimiento ayuda a comprender mejor como opera la policía, qué estrategias usan para ejercer violencia, y cuál es la mejor manera de protegernos contra esa violencia. Esto también puede ayudar a sistematizar nuestro conocimiento desde la práctica para el futuro. está en constante evolución. No obstante, nos gustaría compartir nuestras experiencias y hacer accesibles los conocimientos que hemos adquirido. Sobre todo porque nos damos cuenta de que la policía se siente limitada en su actuar por nuestra práctica. También estamos viendo que muchos de los que participan en la manifestación, incluides nosotres, se sienten empoderades para estar en la calle. Esta toma de conciencia puede ayudar a los grupos locales en sus actividades políticas y también podría inspirar a activistas de otros lugares. Estamos convencides de que este conocimiento del movimiento ayuda a comprender mejor como opera la policía, qué estrategias usan para ejercer violencia, y cuál es la mejor manera de protegernos contra esa violencia. Esto también puede ayudar a sistematizar nuestro conocimiento desde la práctica para el futuro.

¿Por qué una SoliDemoWatch?

Desde el inicio del bombardeo de Gaza en Octubre 2023 pudimos observar expresiones de solidaridad en las calles en todo el mundo. En numerables ciudades crecieron protestas constantes con el fin de alcanzar un cese al fuego, y terminar con el genocidio y la ocupación en Palestina. Especialmente en los primeros días de octubre la gente iba a las calles para expresar colectivamente ira y tristeza por la situación devastadora en Gaza. Esto, sin embargo, fue inmediatamente prohibido en Alemania. Desde el principio se hizo claro que en Alemaniaestaría prohibido lamentar la perdida de vidas palestinas. Protesta y condolencias con la gente en Gaza y Cisjordania son desacreditadas y criminalizadas en Alemania.  En lugar de solidaridad, la comunidad palestina se encontró la violencia del estado alemán con toda fuerza: Mítines y manifestaciones en solidaridad con el pueblo palestino son prohibidas sin distinción alguna o cubiertas de limitaciones. Les protestantes son golpeades y detenides por la policía de manera arbitraria. Vídeos de las manifestaciones muestran cómo policías aplastan con sus pies las flores que se habían puesto junto con velas para las personas asesinadas en Palestina. Además, se acumulaban los controles generalizados realizados por los cuerpos policíacos en vecindarios marcados como „problemáticos“ en Berlin, pero también en otras ciudades de Alemania. Una marca de la política de represión racista fue, por ejemplo, que traer una Kufiya fue visto como un símbolo antisemita, tanto así que en algunas escuelas de Berlín fue prohibido.  Sin duda, estos actos políticos hacen clara una motivación racista del castigo en Alemania: todas las formas de duelo por la vida palestina y cualquier muestra de apoyo hacia la lucha palestina deben ser castigadas. En Alemania el espacio para protestar contra la destrucción sistemática de la vida en Gaza está prohibido. La política de estado promueve no solo la censura de la resistencia palestina, sino que la exige. En Alemania debe ser posible solamente una voz en el espacio público: solidaridad incondicional con Israel. „En este momento solo hay un lugar para Alemania. El lugar al lado del estado de Israel. Eso queremos decir cuando decimos: la seguridad de Israel es la razón de estado alemana“, así dijo el Canciller alemán Olaf Scholz en una declaración de gobierno. Con estas palabras se erigieron los límites del pensamiento y la palabra. A partir de este momento todos los intentos de nombrar los crímenes del ejercito israelí y solidarizarse con la lucha palestina tiene como consecuencia ser llamade simpatizante de terrorismo o atisemita. La „solidaridad incondicional con Israel“ se transformó así en la única posición aceptada en el espacio público. El 7 de octubre se convirtió en un medio más para criminalizar a la comunidad palestina, la cual es constantemente reprimida en Alemania por el simple hecho de aparecer en público. Desde entonces, en los medios alemanes y en el discurso de estado se habla de un „antisemitismo importado“, el cual, supuestamente, llegó a Alemania con las personasracializadas como musulmanes. Con este discurso racista, el estado y la cultura dominante hacen como que no son anti-semitas. Este discurso también ha sido adoptado por algunas fracciones de la izquierda. Esto está dado por la historia de la izquierda blanca en Alemania y la forma de su lucha contra el nazismo. Hay una ruptura en la izquierda. Una fracción de la izquierda piensa que debe defender al estado de Israel a toda costa porque esta en la única forma de defender la vida judía. Por esta razón, una parte de los antifascistas está de acuerdo con la lógica del estado alemán descrita anteriormente y acusa toda forma de solidaridad con Palestina de ser antisemita o terrorista. De esta manera el gobierno y la sociedad dominante escapan su responsabilidad hacia la vida judía. Este "anti-anti-semitismo" es una instrumentalización de la vida judía para los fines de una política racista. Todo esto está pasando en el contexto de la política de asilo inhumana y asesina en Europa (esto es, en el contexto de la "Reforma del Sistema Europeo Común de Asilo (SECA)"). De esta manera el gobierno alemán avanza leyes que facilitan las deportaciones, las hacen más violentas y con mayor frecuencia. ​​​​​​

Pasar a la acción

Una alianza de grupos abolicionistas tuvo el impulso para volver a reflexionar sobre los principios abolicionistas fundamentales y responder a la crisis de la izquierda en Alemania frente a la razón de estado con la reconstrucción de nuestras estructuras. Porque, como dice Mariame Kaba, "la esperanza es una disciplina“. Sentíamos la necesidad urgente de oponer una reacción a la sensación de impotencia frente al establecimiento de fronteras y límites con la razón de estado; de esta forma se busca apoyar a las personas palestinas que son criminalizadas de manera masiva. La idea básica es que mostramos solidaridad con les afectades por la violencia policíaca y al hacerlo protegemos la posibilidad de acción política y expresión de opinión en la esfera pública. Esto lo hacemos mediante la observación del órgano que aplica la razón de estado. Observamos a la policía. La idea es que la policía se sienta restringida en su actuar porque sabe que la estamos vigilando. En lugar de confiar en la seguridad del estado, nos cuidamos entre nosotres. No confiamos en el estado y sus autoridades de seguridad. Las numerosas iniciativas contra el terror y la violencia de la derecha nos han enseñado a tomar las cosas por nuestramano, a saber, todas. Esto significa, para empezar, que nuestro trabajo debe estar basado, mucho más que nunca, en redes auto-organizadadas y solidarias que no dependen de terceros que pudieran influir nuestra agencia política. No podemos confiar en que nadie nos proteja, especialmente no la policía. A largo plazo queremos poder motivar a más personas a cuidarse entre sí, sin la prevalente lógica del castigo. 

Una mirada a la práctica

El concepto de SoliDemoWatch se orienta en el trabajo de grupos Copwatch (vigilancia de la policía), los cuales, mediante monitoreo y registro de las actividades de la policía intentan interrumpir sus rutinas. Además, se busca dar a conocer al público la naturaleza violenta de la policía. SoliDemoWatch acompaña las manifestaciones solidarias con Palestina y apoya protestas que sabemos que cuentan con mucha violencia policíaca. En acuerdo con les organizadores participamos como SoliDemoWatch en la manifestación. Nos movemos alrededor de les manifestantes con la policía en la mira. Traemos puestos unos chalecos fosforescentes marcados con el nombre del grupo para que la gente nos pueda identificar. Así seguimos los movimientos de la policía con una distancia de pocos metros y anotamos cada medida policía, así como características llamativas. Especialmente observamos atentamente situaciones en las que la policía parece prepararse para atacar a les manifestantes, por ejemplo, cuando se reúnen las unidades, se ponen ropa militarizada o se anuncian intervenciones. Cuando se adoptan medidas represivas, como detenciones violentas y controles de identidad, permanecemos el mayor tiempo posible al lado de les afectades. Repartimos tarjetas con nuestro número de teléfono al que la gente puede llamarnos después de la manifestación. Mediante este número telefónico podemos poner a les afectades en contacto con abogades solidaries o proporcionarles asesoramiento general sobre qué hacer en caso de denuncia. Los datos son trabajados con el fin de hacerlos públicos. También, intentamos documentar casos de represión de manera que en caso de violencia por parte de la policía o una denuncia les afectades puedan usarlos en su defensa.

Nuestras observaciones

La sospecha generalizada contra personas palestinas y las personas que se solidarizan con elles ha sido muy clara en las manifestaciones que hemos acompañado. De Berlin llegan montones de imágenes de violencia física contra les manifestantes. En Colonia y Bonn observamos, principalmente, la represión contra frases y carteles, aunque también se ha ejercido violencia física por parte de la policía. En Colonia y Bonn observamos sobre todo violencia en forma de censura. Sin embargo, la violencia física ha sido presente también en muchas ocasiones. La criminalización comienza con las órdenes de la policía, las cuales son impuestas antes de la manifestación y entregadas en un documento. Las órdenes son ya de por sí la expresión de la razón de estado y su violencia racista. Entre otras cosas estas contienen la prohibición de distintas frases, como „Alto al genocidio“, „Desde el río hasta el mar, palestina libertad“ o „Israel es ilegal“. Otras restricciones son anunciadas a placer durante la manifestación. Por ejemplo, carteles con la frase „Googlea Nakba“ fueron recogidos y clasificados como delitos. Según la policía, estas frases corresponden al delito de „incitación al odio“, el cual es la base para perseguirlos como delitos. En Bonn y Colonia se prohibió a les manifestantes gritar consignas en otros idiomas diferentes al alemán. Así también, con respecto a los discursos. Antes de algunas manifestaciones fueron confiscados letreros y pancartas, independientemente del contenido y, algunas veces, no fueron regresados, solo porque parecían sospechosos. Sin excepción, en cada manifestación a la que acudimos se presentaron cargos penales contra al menos alguna persona manifestante. El alcance de las canalladas y la represión se expresa además con la presencia masiva de la policía. La mayoría de las veces, había más policías que manifestantes en las manifestaciones. Los números de policías fluctúan entre 10 y hasta 40 vehículos policíacos. El escenario de amenaza que esto crea es poderoso: se reúnen fuerzas policíacas de todo el estado de Renania del Norte-Wesfalia (el estado donde se encuentran las ciudades de Colonia y Bonn) en las manifestaciones, así como perros policía, metralleta y unidades de toma de evidencia y de detención. La constante toma de video, así como el empleo de equipo militarizado es la regla. Hasta ahora, contamos al final de cada manifestación siempre con estallidos de violencia iniciados por de la policía y en la mayoría de los casos contamos con detenciones parciales. Elpretexto para estas medidas es la mayoría de las veces „incitación al odio“. En algunas ocasiones, personas que cantaban canción de liberación de otras partes del mundo con la frase „nuestros ríos fluyen libres“ fueron sacadas brutalmente de la manifestación, inmovilizadas en el suelo y aplastadas por la policía. Además, pudimos ver que no se hace ninguna diferencia en el caso de infancias y juventudes.   Lo pérfido es que la represión se legitima a sí misma, así como el trabajo policíaco en muchos otros casos. Por un lado, se levantan múltiples denuncias para, así, producir supuestos grandes números de delitos en las manifestaciones solidarias con Palestina, lo que a su vez lleva, por otro lado, a que en las siguientes manifestaciones se justifique movilizar un mayor número de cuerpos policiacos. Esto también sirve para apoyar el discurso racista de que las personas racializadas como musulmanes son fundamentalmente violentas y así, justificar controles sin razón, incluso más allá del contexto de las manifestaciones.

¿ Dónde están las estructuras solidarias establecidas?

En las manifestaciones casi no se encuentran estructuras o grupos establecidos de la izquierda blanca. Además, estos mismos grupos incitan al odio contra personas palestinas y grupos solidarios. Las estructuras solidarias con palestina son denunciadas en artículos periodísticos y blogs, y acusadas de ser antisemitas. Vemos una y otra vez que personas que se identifican como de izquierda cooperan con la policía y les comparten videos que toman durante la manifestación. Actualmente hay limitaciones masivas al derecho de manifestación libre en Alemania y es absurda la cantidad de violencia policíaca que viene con la criminalización de la protesta. ¿Cómo es posible que el principio „si tocan a unx, nos tocan a todes“, es decir, solidaridad con todes les afectades por la represión de estado no aplica en el caso de las personas palestinas?  Nosotres seguimos con la convicción firme de que nadie puede ser libre, hasta que todes sean libres. Especialmente en estos tiempos intentamos, una y otra vez, recordar este principio y no tomar parte en discursos separatistas. En vez de eso, queremos intentar aguantar más, encontrarnos a mitad de camino, escucharnos mutuamente y encontrarnos en las calles y en nuestras cocinas. Solamente así lograremos impulsar cambio. Porque para nosotresSoliDemoWatch es precisamente eso, una reacción a un movimiento distanciado, lo que lleva a la inmovilidad y la falta de utopías. Es una forma de venir a la acción y ser solidaries en las calles. Por supuesto, vemos una y otra vez cómo está determinado el equilibrio de poder en este país: desigual y unilateral. Pero también nos muestra que estructuras como SoliDemoWatch pueden apoyar a les afectades por la violencia policial, interrumpir a la policía en sus rutinas violentas y que actuar en colectivo conduce a formas más firmes de resistencia. Solo se necesita chalecos, cuadernos, plumas y tarjetas con un número solidario al que la gente puede llamar para pedir ayuda. SoliDemoWatch es posible en todas partes. *Grundrechtekomitee (Comité de derechos fundamentales) ha hecho observaciones de manifestaciones, por ejemplo, en el contexto del movimiento contra la injusticia climática en Lützerath. copwatch es un conjunto de colectivos a nivel nacional que documentan casos de violencia y racismo policíacos.